acoso generacional

   El acosador psicotrónico puede hacer creer a la víctima que ha contactado con un "ser superior" (meidante recuerdos implantados, drogas, sensopercepción, hipnosis, etc). Tal acoso puede dar lugar no solamente a daños momentáneos, sino perdurables en el tiempo.



   Por tanto el acosador psicotrónico puede elavorar planes premeditados, entre ellos me voy a referir en concreto a los que abarquen varias generaciones de víctimas: abuelos, padres, hijos, nietos... de modo que el acoso va adquiriendo un grado progresivo de generación en generación: por ejemplo a la primer generación le aplican métodos "MK-Ultra" o "Monarca" y se les induce conductas que aplicarán ellos mismos a sus propios hijos, y estos a su vez transmitiran a sus descendientes algo similar. La consecuencia de este plan puede ser el debilitar la voluntad del individuo, convirtiéndole en un ser manipulable con facilidad, o por el contrario hacerle más fuerte al acoso (de identificarlo como tal) o simplemente volverle loco; en cualquier caso se trata de una situación dificil para el acosado.


   Considero que este "plan generacional" ha sido llevado a la práctica, y voy a poner los ejemplos de Antonin Artaud y de Mickel Jackson. El poeta francés padeció una infancia conflictiva con una madre que, sin explicación lógica alguna, le trataba de forma cordial o violenta, causándole problemas de personalidad que después acusó de adulto. El cantante norteamericano sufrió igualmente el trato tiránico y paternalista de su progenitor, y su vida personal quedó afectada pese al gran éxito que consiguió, manteniéndo relaciones extrañas con las personas y otra clase de manías.



   Trasladando el asunto al común a los ciudadanos ¿recuerdas, lector, alguna actitud extrañamente contradictoria durante tu educación, en la infancia, que te causara confusión, pánico o profunda conmoción? No se trata de la simple ignorancia infantil, ni de la diferencia generacional con el educador, sino de algo verdaderamente enfermizo, de conductas inexplicables, probablemente promovidas en el educador por acoso psicotrónico.

percepciones

   Como consecuencia del acoso psicotrónico el individuo puede acusar una serie de percepciones:


percepción simbólica

  El mero hecho de sospechar que existe una injerencia externa que altera la mente, o que causa varios tipos de malestar físico, aumenta la capacidad para interpretar simbólicamente; por ejemplo la interpretación de la película “Matrix” en la cual se equipara lo que en dicho film es estar conectado a una máquina y lograr “despertar” del letargo, con el hecho de estar padeciendo el control mental y denunciarlo.



  La parte negativa de este suceso es que se convierta el algo obsesivo, y la persona termine por padecer el síndrome de (creer que las cosas suceden a propósito para si mismo). En este sentido conviene no dar mayor importancia a tales comparaciones simbólicas, sino aceptar simplemente que se ha desarrollado la capacidad para apreciarlas, pero eso no significa nada en concreto, es más, el acosador puede utilizarlo para hacer creer al IF que está recibiendo señales de un ente desconocido, y desorientarle malévolamente.





empatía

  Es como un talón de Aquiles, porque el acosador se aprovechará de ello para manipularle sicológicamente. Además, el descontrol de la empatía lleva a la persona a ponerse en situación de terceros sin razón justificada, perdiendo la propia soberanía sobre sí mismo, sobre sus verdaderos intereses.



El acoso recibido puede debilitar la voluntad de la persona, y desarrollar empatía de forma inadecuada.





individualidad

  Es más fácil acosar a personas solas que si viven en compañía. Una de las características del acoso es el no dejar huellas, y los acompañantes del IF pueden llegar a ser testigos de algún suceso. El propio descrédito ante los demás puede aislar a la víctima.